El senador (hasta ahora) priísta Jorge Carlos Ramírez Marín ha dicho en muchas ocasiones su interés en ser candidato a la gubernatura de Yucatán. Sin embargo, en las últimas declaraciones mencionó que no le alcanza con el PRI y afirmó que el error de la alianza nacional ha sido construirla desde lo nacional y no desde lo local.
También mencionó que tiene información fundada de que el PAN de Mauricio Vila y Renán Barrera no tienen interés en una alianza con el PRI en Yucatán.
Mucho ha dicho el senador sobre una transformación en Yucatán y algunos lo han interpretado como una señal adicional para unirse al Morena o al Verde Ecologista.
En Realidad, las oportunidades reales de Ramírez Marín para alcanzar la gubernatura son prácticamente nulas.
Si jugara por el PRI, el partido no tendría ninguna posibilidad de ganar, si lo hiciera con el PAN-PRI-PRD no tendría posibilidad siquiera de llegar a la candidatura, pues el PAN ya eligió a Renán Barrera, y si jugara por Morena, mucho menos, pues está claro que la candidatura será para Verónica Camino Farjat o Joaquín Díaz Mena.
También se habla de irse al Partido Verde, pero habría que esperar si el partido jugaría o no en alianza local, pues trasciende que el Verde Ecologista ya acordó una alianza con el PAN en Yucatán.
La pregunta es: ¿cuál es el juego político de Ramírez Marín? Pues claro está que ser candidato a gobernador no lo es, ya que tiene nulas posibilidades con esa candidatura en algún partido, ¿será que lo que quiere en realidad es un cargo estatal que le permita gestionar recursos? ¿Querrá jugarse la candidatura por Mérida? De ser así habría que preguntarse si Ramírez Marín le suma al partido guinda, pues mucho se ha dicho sobre las múltiples invitaciones al diputado panista Rommel Pacheco quien dicen puede ser una buena carta de Morena a la alcaldía de Mérida. ¿Qué será más rentable para Morena en Mérida, Rommel Pacheco o Jorge Carlos Ramírez Marín? Te leo en comentarios.
Comments