En julio del 2021, Jose Eduardo Ravelo fue detenido por policías municipales en el centro de Mérida y pocos días después murió. De acuerdo a lo que el joven de 23 años le relató a su madre al ser puesto en libertad, fue golpeado y abusado sexualmente por los agentes municipales.
Este caso representó uno de los mayores escándalos en el Ayuntamiento de Renán Barrera Concha, quien fue señalado de solapar actos de brutalidad policial, así como de revictimizar al agredido. Incluso, en un primer momento, autoridades estatales señalaron al municipiol por lo ocurrido, lo cual llevó a varios días de dimes y diretes entre ambos niveles de gobierno, en un intento por adjudicarle al otro la culpa de lo ocurrido.
Debido a esta confrontación política, y a la liberación de los 4 policías municipales que presuntamente violentaron a Jose Eduardo, el gobierno federal le pidió a la Fiscalía General de la República que investigara el caso.
La fiscalía, cuya credibilidad ya estaba en duda debido a la excesiva politización de casos durante la actual gestión, determinó que los policías no agredieron a Jose Eduardo, y que éste falleció por negligencia médica.
Sin embargo, semanas después, la Comisión Nacional de Derechos Humanos determinó que sí se torturó y asesinó a Jose Eduardo Ravelo, por lo cual exhortaba a la Fiscalía continuar con la investigación, y pedía al ayuntamiento encabezado por Renán Barrera Concha pedir disculpas públicas a la familia de la víctima, lo cual no sucedió.
Agregando mayor complejidad a la situación, a raíz de este caso, el Consejo de la Judicatura decidió no ratificar la continuidad del juez que liberó a los policías municipales señalados de haber violentado a Jose Eduardo.
Hoy, la madre de Jose Eduardo tiene una asociación civil con la cual busca combatir actos de violencia por parte de policías.
En realidad, el asesinato de Jose Eduardo Ravelo aún indigna, no solo en el estado, sino también a nivel nacional. Indigna tanto por la violencia cometida en contra del joven, como por la falta de certidumbre entorno a la investigación y los fallos de las autoridades.
Es importante que discutamos sobre esto pues, al haber sido un acto de presunta violencia por parte de policías, estamos ante un tema político que nos lleva a reflexionar sobre qué tanto estamos dispuestos a tolerar estos excesos por parte de la autoridad. En la reflexión, no debemos olvidar que, de normalizarse este tipo de violencia, ninguno de nosotros estamos exentos de ser víctimas.
¿O tú que opinas?
Opinión de Luis Hevia Canto.
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